Me amaba el noema y ya no me retila la murta
HORACIO OLIVEIRA
Emotivo en ese encuentro
sonrisa niña amor destilabas
sin esfuerzo anonadado
sin preámbulo ni protocolo
te dabas en este siglo sin sigilo
con vino y cara a cara
desnudados de obligaciones y contratos
soledad sonora en el mismo territorio y pertrechados
en un hotel barato un café rancio y a comernos con deleite
con los gajos de una tarde amarillenta
el jugo jugando en nuestras lenguas
parloteando de sabores con papilas gustativas
nos bebimos nuestros cuerpos asilados a la sal
era tu pelo rojo y en cascada
un futuro de instantes por hoteles
inventamos los domingos con las luces apagadas
te anunciaste en humedades por tus labios
y yo enjuagándote en los míos
se inventaba mentolado el día cayendo
con ansias y manos más ansiosas
las caricias en parvadas
anunciaban golontrinos de ayes y venires deliciosos
sin embargo fuimos embargados
por un pacto de falso aniversario
olvidamos el rito del encuentro sorpresivo
nos quedamos con los cuerpos más acedos
la cita programada dándose de bruces en el quicio de la puerta
miraba entre la lluvia la calle oscura del hotel amarillento
el cielo alterado por focos altisonantes
y otras parejas saliendo del gozo como debe ser
con las cuentas ya pagadas
no hay más tiempo entre nosotros
con ansias consumadas en rutinas
olvidamos el cuarto viejo
del quinto paso dado frenesí
del sexo no sentido y sin mordeduras leves
del sexto informe ingobernable de dos cuerpos desfondados en ayer
la coincidencia de la tarde de aquel verano
de aquella risa como anzuelo
nos pone frente a frente con arrugas
con las manos en la mesa
y la cuenta de los días
las obligaciones abrumaron
se adhirieron como recuerdos imán
en un refrigerador hospitalario
y la clara advertencia en el pecho cada día
: arritmia sentimental
quizá un placebo mañana o un engaño después
O las golosina de losartán ya de pormuerte
las manos ansiosas cayeron en bolsillos alcahuetes
las bocas besantes callaron por los gritos de mandos medios
los pechos agitados (agotados) son controlados con pastillas
sólo el ácido ayer anaranjado se exprime en la mañana
como dieta preventiva de gripes y moqueos
*del libro en preparación todas las gotas son la lluvia
ARMANDO OVIEDO ROMERO- Poeta, narrador, editor y ensayista literario.
Ha publicado el libro de cuentos Manzanas de Sodoma UIA, 2012; el ensayo-entrevistas Cazar al vuelo. (Po)éticas y (Ex)posiciones. Arlequín, 1999, el poemario Zona de niebla, e-book, 2013, entre otros.
Actualmente es profesor del Taller de Poesía en Faro de Oriente, Iztapalapa.